En este trabajo se analizó la Canasta Básica Alimentaria (CBA) de México, considerada como el indicador oficial de una dieta estándar que mide –de manera directa– los requerimientos mínimos de alimentos y nutrientes necesarios para la subsistencia y –de manera indirecta– los niveles de pobreza y desigualdad social. Se enfatizó en sus limitaciones como herramienta de política social que, por lo general, ha estado sujeta a evaluaciones constantes en el medio institucional y a discusiones académicas que cuestionan su eficacia. Parte de las inquietudes está en saber si es el acceso por ingreso, la disponibilidad de alimentos en la región, las preferencias alimentarias o una combinación de variables lo que determina el patrón de consumo alimentario con el que se construye la CBA. Con base en información documental generada en el medio oficial, así como reportes del CONEVAL, avances de investigación propios y diversas fuentes bibliográficas, se plantea que mientras que los patrones alimentarios son procesos sociales dinámicos y cambiantes, la CBA se ha convertido en un instrumento relativamente estático, que refleja una medición poco objetiva y precisa del bienestar social de los mexicanos.
Abstract:
The aim of this article it to analyze the Basic Food Basket (FB) of Mexico, considered as the official indicator of a standard diet that measures, directly, the minimum requirements of food and nutrients necessary for subsistence; and indirectly, the levels of poverty and social inequality. Thus, the research emphasized on its limitations as a tool of social policy that, in general, has been subject to constant evaluations in the institutional systems and to academic discussions that question its effectiveness. Some of the concerns consist in knowing whether access by income, food availability in the region, food preferences or a combination of variables determines the pattern of food consumption with which the food basket is been built. Based on documentary information generated in the official media, as well as CONEVAL reports, own research advances and various bibliographic sources, it is argued that while dietary patterns are social dynamic and changing processes, FB has become a relatively static instrument, reflecting a poorly objective and accurate measurement of the social well-being of Mexicans.